El pasado 12-11-21 se publicó en el DOF la reforma fiscal para 2022. Aquí algunas novedades:
1) La creación del “Régimen simplificado de confianza” para que las personas físicas que realicen actividades empresariales, presenten servicios profesionales y arrienden bienes inmuebles paguen su ISR; ello cuando, entre otros requisitos, sus ingresos en un ejercicio no superen $3,500,000.00. La tasa máxima a pagar será 2.5% de sus ingresos y no aplicarán deducciones.
2) Regresa el dictamen fiscal, obligando al Contador Público que detecte que un contribuyente ha realizado alguna conducta que pueda constituir la comisión de un delito fiscal, lo informe a las autoridades fiscales; de no hacerlo, se le considerará responsable del delito de encubrimiento.
3) Se limita el monto de los donativos que pueden hacer las personas físicas a donatarias autorizadas.
4) Se aplicará la tasa del 0% de IVA en la venta de alimentos para animales y productos de higiene menstrual
5) Se establece la obligación de inscripción en el RFC de todos los mayores de 18 años bajo el régimen “personas físicas sin actividades”.
6) Todos los contribuyentes personas físicas con actividades empresariales, servicios profesionales y arrendadores de inmuebles, deberán llevar contabilidad para efectos fiscales.
7) En la verificación del domicilio fiscal se podrán usar herramientas tecnológicas. (geolocalización).
8) Nuevos requisitos para los CFDI (certificado fiscal digital) cuyo incumplimiento puede llevar a que una partida sea no deducible.
9) Se regula la simulación para efectos fiscales a fin de combatir esquemas de planeación fiscal.
10) Se limita a 12 meses el plazo para alcanzar un acuerdo conclusivo.
11) En el PAE (procedimiento administrativo de ejecución embargo) se posibilita el embargo de bienes vía electrónica, lo que se notificará a través del buzón tributario.
12) Ya no habrá devoluciones automáticas, todas deberán solicitarse.
La reforma cumple el compromiso de no establecer nuevas contribuciones, a cambio, dota a las autoridades fiscales de nuevas herramientas para combatir prácticas consideradas indeseadas y forzar un cambio en la mentalidad de los contribuyentes respecto del cumplimiento oportuno de sus obligaciones fiscales.